
El simbolismo en Excalibur
​
La pelicular Excalibur de John Boorman (1981) está basada en una novela que refleja muy bien la leyenda del Rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda. En esta leyenda resalta la figura de Merlín el Mago que guía a Uther Pendragón a una paz con sus adversarios mediante la entrega de la espada de poder, Excalibur, que es entregada por la Dama del Lago. Sin embargo esa paz se ve truncada por el deseo que siente Uther hacia la esposa (Igrayne) de su adversario. Merlín ayuda a que Uther cumpla su deseo, a condición de que el le entregue el fruto de su unión con Igrayne. Hace que Uther flote sobre el acantilado y que cabalgue sobre las espaldas del "dragón". Así nace Arturo. Morgana, su hermanastra hija de Igrayne prevé la muerte de su padre. Cuando Uther quiere recuperar a su hijo de los brazos de Merlín, muere producto de una emboscada y al momento de morir clava Excalibur en una piedra (Excalibur significa justamente, "la que es liberada de la piedra" , Ex Calce Liberatus). Desde ese momento surge el desafío de sacarla de la piedra para caballeros de todo el Reino, con la promesa de que el que la sacare se coronará Rey. En una de los tantos torneos celebrados a raíz del derecho a sacar la espada, Arturo, que era un escudero la encuentra y sin saber de qué se trataba la saca de la piedra. Algunos vieron este hecho, y aunque volvió a ponerla en la piedra, se generó una disputa que terminó con Arturo haciéndose de la espada nuevamente y coronándose Rey. Como Rey empezó la pacificación del reino ganando batallas siempre con Excalibur. De pronto surgió otro caballero, Lancelot que desafió a Arturo en su reino. Arturo lo venció apoyándose en el poder de Excalibur pero quebró la espada. Sin embargo, con la ayuda de Merlín, la espada volvió a salir del lago, La Dama del Lago se la entregó intacta. Lancelot se convirtió en el brazo derecho de Arturo. El Rey se casó con Ginebra (Guenevere), y junto con Merlín y el resto de los caballeros del Reino vencieron en muchas batallas y pensaron que eran invencibles, que las virtudes había derrotado al mal, y que la paz y la abundancia habían triunfado en su reino. Sin embargo el mal acechaba desde el lugar menos pensado, Lancelot y Ginebra se habían enamorado. Esto lo advirtió maliciosamente Morgana la bruja y provocó un quiebre entre los caballeros de la Mesa Redonda. El honor de la Reina lo defendió Parsifal, un lugareño que fue nombrado caballero para tal efecto. Sin embargo Lancelot y la reina finalmente traicionaron a Arturo, la espada volvió a la piedra y ellos huyeron del Reino. Arturo había perdido su poder. Merlín había caído embrujado por Morgana la hechicera y ya no tenía ayuda de nadie. Pestes y pobreza empezaron a asolar el Reino. Morgana en sueños seduce a Arturo y le engendra un hijo al que Morgana reviste de toda clase de poderes mágicos sobre los cuales "ningún poder humano" podrá vencerlo. El nombre del hijo es Mordrain, y se convierte en el hijo impío del Rey. Se inicia la búsqueda del Grial que salvará al Rey y al Reino. Los caballeros salen en su búsqueda sin embargo todos fracasan y mueren, excepto Parsifal que continua solitario la búsqueda. Casi desfalleciendo encuentra el Grial y da con el enigma que se le plantea "El Rey y la tierra son uno". Esto a pesar de los muchos obstáculos que Mordrain y Morgana le opusieron a su búsqueda. Entonces Parsifal da de beber del Grial a un Arturo desfalleciente y se llena de ánimos y revive. Arturo junta a los pocos caballeros que quedaban en el Reino y decide enfrentar a su hijo Mordrain que le estaba reclamando el reino bajo amenaza de quitárselo a la fuerza. Antes de la batalla final, acude a Merlín bajo el escenario de Stonehenge. Merlín había vuelto desde los mundos donde estaba congelado y había quitado todo su poder a Morgana, quien perdió su juventud y belleza con el "hechizo de la creación". Morgana finalmente muere a mano de su propio hijo Mordrain quien no soportó ver su senilidad y debilidad. Arturo visita a Ginebra su ex esposa quien se había convertido en monja y ahí ella le entrega Excalibur que la había guardado. Ya con Excalibur, Merlín y con unos pocos caballeros fieles, se enfrenta a su propia creación en cruenta batalla. Se le une Lancelot y finalmente vencen a las huestes enemigas. Arturo y Mordrain se dan muerte mutuamente y Parsifal es conminado por Arturo moribundo a que busque un lago tranquilo y lance la espada Excalibur, "porque otro más adelante será merecedor y la podrá tomar y resurgirá nuevamente". Finalmente Arturo es llevado en una barca fúnebre por el mar, custodiado por seres divinos.
Simbolismo. El ego es nuestra propia creación, el dolor de este mundo. Tal como se dice en "El vuelo de la Serpiente Emplumada (Armando Cosani), el ego es ilusión, dolor y muerte. La conciencia (Cristo) es la verdad y la vida. El ego surge en nosotros a raíz de una desobediencia a las leyes divinas ("No fornicarás") y tiene una raíz sexual, es la segunda naturaleza en el ser humano. La pareja que decide expiar ese error debe recorrer el camino del Arcano, la transmutación, que dará origen en algún momento al nacimiento del fuego sagrado en la columna vertebral. Cuando eso sucede en los mundos internos se le entrega al iniciado una pequeña espada. El fuego sagrado significa desenroscar la serpiente Kundalini que yace en nuestro coxis y que es nuestra Madre Divina particular (todos los seres la tienen). Ella es la Dama del Lago que entrega la espada al Iniciado, a cambio de una recta conducta. La Dama del Lago siempre surge de un Lago en calma, nunca de un mar tempestuoso, esto significa que una persona a merced de sus bajas pasiones jamás podrá recorrer este camino iniciático, se necesita ser tranquilo de corazón, y esto implica mucha muerte con los detalles de los defectos que todos cargamos. Siempre el primer factor es el que permite el segundo factor. Entonces nuestra creación impía es el Ego (Mordrain), fuimos tentados por el lado negro (Morgana), y Arturo es el Iniciado. Merlín representa a la Logia Blanca que siempre lo ayuda y lo apoya en esta trascendental tarea de liberarse. El ego no puede ser eliminado por nosotros mismos, por eso Morgana le da poderes que ningun terrestre podrá vencer, se necesita a Dios mismo, que subyace en nosotros también, nuestro Padre Interno y nuestra Madre Interna para poder disolverlo. Se dice que Excalibur es sacada de la piedra, porque el sexo es representado por la piedra desde tiempos inmemoriales (Roca de Escandalo, Piedra de Tropiezo), y pocos son los que pueden permanecer fieles en el segundo factor de la transmutación entre tantas tentaciones. El dragón representa el instinto sexual, Lucifer, que tienta desde los fondos anímicos de la persona, si vencemos sobre la tentación, se transforma en Luz, si caemos vencidos se forma el Ego. Arturo tenia su esposa pero es traicionado por su mejor caballero, con esto Arturo pierde su pareja y con ella su transmutación y su camino iniciático. Va perdiendo energía, y empieza la vejez y las enfermedades, hasta que puede encontrar nuevamente, después de muchos años la Copa Iniciática, el Vaso Sagrado de Hermes o el Santo Grial. El Grial que representa a la mujer con la que podrá finalmente eliminar totalmente a su propia creación, el Ego. El Ego (Mordrain) se quería apropiar del reino, es decir, del cuerpo físico del Iniciado, tomar el mando, la vocería del cuerpo, que es la situación en la que estamos metidos todos en la humanidad. Finalmente Arturo elimina sus defectos mediante el trabajo sexual, forma los cuerpos existenciales y tiene derecho a entrar a los cielos o dimensiones superiores de la Naturaleza. Ha realizado la Gran Obra que todo ser humano está llamado a llevar a cabo, vuelve al seno de su Padre y tiene derecho a volver al absoluto desde donde todo nació como un verdadero Maestro.

